Ángel Gasch

RESUMEN

En la actual situación socio-política global, es necesario conocer y visibilizar las necesidades específicas de salud de las personas sexo-género diversas. Además de las vivencias de opresión, la pretensión universal de heterosexualidad y la falta de una intervención interdisciplinar, suponen barreras a una correcta actuación sanitaria, derivadas de la concepción cis-heterocentrista de la estructura sexo-género en la cultura occidentalista.

Por ello, urge analizar el papel que la salud comunitaria tiene como agente de cambio para conocer los recursos de empoderamiento y equilibrio que, ante la adversidad, desarrollan las personas LGBTI. Un enfoque positivo que se observa en lo personal, en las estrategias de resiliencia que se crean para legitimar los afectos y construir e inventar los propios deseos. Las formas de relación de las personas LGTBI son transgresoras con el sistema sexo-género y en las comunidades, muestran otras maneras de cuidarse y de establecer redes de apoyo. Se trata de una transformación de los entornos sociales, con su presencia cotidiana en los barrios. También en las instituciones, la participación en la toma de decisiones y en la distribución de los recursos, exige cambios más cercanos a la diversidad, que permiten legitimar espacios de tránsito hacia la equidad.

En este simposio se presentan líneas de estudio emergentes que identifican lagunas de conocimiento como la actuación hacia la salud mental de las mujeres lesbianas desde la Terapia Ocupacional, o la falta de intervenciones centradas en la salud sexual de estas mujeres. También se presentan estudios sobre intervenciones relacionadas con el autocuidado, el uso de nuevas tecnologías y aspectos clave de las identidades de género y afectivo-sexuales en la gestión de la propia salud de hombres que tienen sexo con hombres. Observamos también carencias en los dispositivos de atención a la salud de las personas trans y en general, la falta de oportunidades hacia una salud integral, centrada en las realidades de las personas LGBTI a lo largo de su ciclo vital.

FILIACIÓN

Profesor Contratado Doctor en la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Zaragoza. Enfermero con experiencia en asistencia en servicios públicos y privados y docencia en Institutos de Educación Secundaria.

En 2016 defendió la tesis titulada «Las prácticas de riesgo entienden de género. Masculinidades y prácticas de riesgo en hombres que tienen sexo con hombres», por la que obtuvo Premio Extraordinario de Doctorado y en la que analiza las masculinidades y los comportamientos de riesgo en las relaciones afectivo-sexuales, así como su influencia en la salud de los hombres. Realizó una estancia en la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Ottawa (Canadá) y otra en la Universidad de Alicante.

Es integrante de la Sociedad Española de Epidemiología, coordinando el Grupo de Trabajo de dicha Sociedad Científica llamado “Género, diversidad afectivo-sexual y Salud” y de diferentes equipos de trabajo y grupos de investigación. Actualmente su área de estudio se centra en la incorporación de la perspectiva de género y diversidad en la docencia e investigación en Ciencias de la Salud, así como en la asistencia sanitaria. Ha publicado diferentes trabajos de investigación en el área de Salud Pública y Salud Comunitaria en temas de género, sexualidad y salud, desigualdades sociales y estudio de factores de vulnerabilidad.

Colabora con diferentes entidades de ámbito local y autonómico (OMSIDA, TOWANDA) en proyectos con colectivos en situación de vulnerabilidad y personas LGBTIQ, impartiendo talleres y desarrollando actividades de intervención e identificación de barreras y resistencias hacia la salud y desarrollo integral de las personas y comunidades, derivadas de las imposiciones de la estructura de género.